Colombia
El intérprete de vallenato sorprendió a sus seguidores al mostrar, en tono humorístico, los atropellos que sufren quienes recurren a prestamistas informales en Colombia.
Publicado:
Por: Juan Manuel Arias Montenegro
Creativo Digital
La difusión de un video protagonizado por Elder Dayán volvió a poner sobre la mesa el peligro de recurrir a los préstamos informales conocidos como “gota a gota”.
En la grabación, el cantante de vallenato protagoniza un episodio humorístico en el que solicita dinero a un supuesto prestamista, quien termina cobrándole sumas muy superiores a las solicitadas, ejemplificando los abusos comunes en estas prácticas.
El material fue publicado por el creador de contenido Aiton Chinchia, que interpretó el papel del cobradiario.
El préstamo tipo “gota a gota” consiste en pequeñas sumas de dinero entregadas por prestamistas informales, generalmente con tasas de interés que superan el 20% mensual y pueden derivar en deudas impagables.
Incluso, muchos deudores terminan atrapados en un círculo vicioso por la acumulación de intereses, la falta de regulación y la presión diaria para cumplir las cuotas.
Los principales riesgos se resumen en cobros abusivos, intimidación y pérdida de activos, dado que los prestamistas no dudan en exigir documentos personales o bienes como garantía, lo que expone a los clientes a perder su patrimonio.
En el video, Elder Dayán aparece solicitando $600.000, pero termina obligado a aceptar 700.000 para cubrir “gastos de papelería, secretaria y administración”.
El prestamista afirmó: “Te tengo que dar un millón entonces para quedarme con los 300 y te daré los 700”, una parodia que retrata la lógica real de estos prestamistas.
La presión para efectuar el pago inmediato, con la amenaza de embargo de bienes, también se incluyó en el sketch: “Mañana paso por mi plata o si no me llevo el televisor”.
La reproducción del día a día de muchos colombianos se presenta en clave humorística, pero el trasfondo evidencia una problemática nacional que, de acuerdo con la Asociación Nacional de Instituciones Financieras (ANIF), afecta al 65% de la población que permanece excluida del crédito formal.
El estudio de Colombia Fintech y ANIF, citado por Infobae, proporciona datos alarmantes: las tasas de interés pueden llegar al 380% anual para personas y hasta 666,5% para empresas.
Según los datos compartidos, solo el 34% del endeudamiento bancario de los hogares proviene de bancos: un 12% corresponde a mecanismos informales como el “gota a gota”, lo que genera una carga financiera que afecta incluso a empresas, en los que el 30% de los ingresos mensuales se destinan al pago de este tipo de deudas.
La regulación sobre tasas de usura, diseñada para proteger al consumidor, genera efectos adversos porque, según Gabriel Santos, presidente ejecutivo de Colombia Fintech: “Está limitando la oferta de crédito, particularmente para los segmentos más vulnerables de la población”.
Cerca del 50% de quienes solo cuentan con educación primaria terminan recurriendo a mecanismos informales, aunque entre personas con educación superior, esa cifra baja al 30%.
Esta brecha demuestra que la educación financiera incide directamente en la toma de decisiones económicas y en el acceso a alternativas formales más seguras.