Colombia
Recordó cómo nació su relación y cómo fue el apoyo familiar en los primeros pasos del cantante vallenato
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Creativa Digital
Mucho antes de convertirse en una de las voces más representativas del vallenato, Rafael Orozco ya tenía claro que su vida estaría dedicada a la música. Así lo recordó su esposa, Clara Cabello, en una entrevista donde compartió detalles poco conocidos de los inicios del artista. Según relató, desde el primer momento en que lo conoció, él ya estaba enamorado de cantar, y su familia siempre lo apoyó, pese a que en esa época la carrera musical no se veía como una opción estable.
Clara también rememoró cómo las relaciones entre sus familias consolidaron el romance entre ellos. Dos uniones previas entre hermanos y hermanas de ambos facilitaron el acercamiento. Esto generó un vínculo fuerte entre las dos casas, lo que ayudó a que la relación con Rafael se integrara con naturalidad en su entorno familiar.
Clara Cabello relató que Rafael Orozco fue expulsado del colegio de operarias por desorden, y que desde entonces comenzó a frecuentar su casa con excusas familiares. Poco después, se dio la oportunidad de cantar, bailar y animar, y así inició su camino profesional. Con la canción “Consentimiento” comenzó a consolidar su carrera, pero fue “La creciente” la que reveló públicamente su relación sentimental, ya que ella era mencionada en la letra. Ese momento marcó un antes y un después, pues desde entonces ambas familias respaldaron la unión.
También recordó cómo Rafael, con apoyo de amigos y medios como las emisoras Olímpica, logró abrir camino para que el vallenato sonara en estaciones donde antes no tenía cabida. El primer gran evento fue organizado por la Organización Radial Olímpica en Barranquilla, donde se encendió la emoción de los seguidores. Según Clara, aquel día fue inolvidable: hubo celebración con antorchas y camisetas quemadas en señal de júbilo, una muestra del fervor que el artista generaba desde sus primeros éxitos.
Rafael Orozco encontró en el apoyo de amigos y en el impulso de las emisoras una oportunidad clave para proyectarse. Clara destacó el papel de la Organización Radial Olímpica, que empezó a difundir sus canciones en un momento en que el vallenato no tenía espacio en muchas estaciones dominadas por la salsa y otros géneros populares.
Uno de los momentos más significativos fue la participación en el primer festival organizado por Olímpica en Barranquilla. Allí, el entusiasmo fue tal que el público encendió antorchas y quemó camisetas como muestra de euforia. “Eso fue hermoso”, recordó Clara, quien conserva imágenes de aquel evento, testimonio del fervor que empezaba a despertar el vallenato a nivel nacional.
