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El reconocido cantante y compositor de música vallenata posee una historia personal ha conmovido a muchos. Nacido en Cabimas, Venezuela, el 13 de diciembre de 1976, su vida dio un giro inesperado cuando fue adoptado por una familia colombiana a edad temprana.
La adopción de Jean Carlos Centeno marcó un antes y un después en su vida. Fue en Colombia, específicamente en Villanueva, La Guajira, una región reconocida por su rica tradición musical, donde el joven Centeno creció y se sumergió en el mundo del vallenato. Esta experiencia de ser acogido por una nueva familia y de crecer en un entorno musicalmente rico, influyó profundamente en su desarrollo artístico y personal.
El cantante dio a conocer en una entrevista que tiene en su mente el momento exacto en que su mamá lo dejó prácticamente abandonado en casa de quien fue su madre de adopción.
“Fue una madrugada. Yo estaba muy pequeñito. Y estaba oscuro el cuarto. Pero al momento de mi madre abrir la ventana, para volarse por la ventana con mi papá ... entra un reflejo de luz, ella me toma, me da un beso”, afirma el ex integrante del Binomio de Oro.
Centeno dice que su madre le dijo algo cuando se fue, pero en ese momento no entendía a qué se refería. “Me dijo ‘te amo’. Estando ya grande supe que fue lo que dijo”.
Finalmente, en 2017, Jean Carlos Centeno logró reunirse con Nidia María Gómez, su madre biológica. Ella lo había entregado en adopción a María Elena Jiménez, tía de su padre, quien desempeñó el papel de madre durante gran parte de su vida.
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