Colombia
Según Joaco Guillén, amigo del Cacique de La Junta, al artista le molestaban ese tipo de injusticias.
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Creativa Digital
Joaco Guillén, exmánager y amigo cercano de Diomedes Díaz, compartió una anécdota poco conocida sobre la relación del Cacique de La Junta con la Policía y su generosidad con su madre, doña Elvira. En un video reciente, Guillén recordó cómo el ídolo del vallenato solía incluir a los agentes del orden dentro de su “nómina” en cada presentación, como muestra de aprecio por su labor.
Según Joaco, Diomedes siempre consideró a la Policía como un apoyo importante en los momentos difíciles. “Compadre, la palabra Policía es la más fácil al momento de tener un problema. Lo primero que dicen es: llamen a la Policía. Y no es mentira”, contaba el artista con respeto y picardía. Por eso, en cada toque, él mismo autorizaba que se les entregara un incentivo económico a los uniformados.
Guillén detalló que, en ese entonces, una presentación de Diomedes costaba 900 mil pesos. Los músicos ganaban 20 mil cada uno, él mismo recibía 20 mil y Colacho Mendoza 60 mil. El transporte en bus costaba 80 mil, y al Cacique le quedaban 500 mil, de los cuales ya había recibido 200 mil como anticipo. Al terminar un concierto, Diomedes le pidió a Joaco que les entregara 200 mil pesos a los policías por su ayuda, pero él solo les dio 50 mil, lo que causó molestias.
La semana siguiente, al regresar a Barranquilla, los mismos policías se presentaron y lo acusaron ante Diomedes. “El hombre me dio nada más que cincuenta mil”, dijeron. Guillén, sin rodeos, explicó que los otros 150 mil se los había entregado a doña Elvira: “A la señora que se faja cosiendo mochilas en Carrizal para mandarle algo a usted mientras estudiaba”, le respondió. La madre del artista, emocionada, lo abrazó y le dijo: “Yo con usted no puedo, usted es mi ángel de la guarda”.
Más allá de lo anecdótico, Joaco Guillén recordó que Diomedes era muy sensible ante las injusticias sociales. Se quejaba de cómo algunos empleadores maltrataban a sus trabajadores y de las veces en que los más necesitados no recibían ayuda ni para un cajón de muerto o una lista escolar. Esa preocupación se reflejó incluso en algunas de sus canciones.